Contiene componentes que pueden ayudar a aumentar el tamaño y el peso de los clústeres florales. Mejora la captación de nutrientes y las plantas cultivadas dan cosechas más dulces y de mejor sabor.
La manera en que activa el flujo de nutrientes es básicamente liberando en la tierra los minerales calcio, hierro y magnesio que estimulan el metabolismo de la planta.
Es tremendamente eficaz gracias a los ácidos húmicos que contiene. La principal fuente de estos ácidos es una sustancia del suelo conocida como leonardita.
Los ácidos fúlvicos poseen propiedades particulares que contribuyen a un crecimiento floral sano. Su carga eléctrica natural atrae los nutrientes y minerales presentes tanto en la base de suelo microbiológico como en los fertilizantes orgánicos aplicados.
Los ácidos húmicos y fúlvicos trabajan conjuntamente para aumentar la energía de las células viejas de las plantas y estimular la formación de otras nuevas.
USO Y APLICACIONES:
Durante todo el periodo de floración.
En las primeras semanas de floración, recomendamos una dosis de 1 ml por litro de agua. A medida que se aproxima la cosecha y antes de proceder al enjuague, la dosis se puede aumentar hasta los 4 ml por litro de agua.